¿Qué delata la edad de una mujer?

La naturaleza de la mujer le hace perseguir un aspecto fresco y siempre joven. Hay muy pocas mujeres que pueden afrontar el hecho de que ya no son jóvenes y guapas como años atrás. Se arreglan los labios, se rellenan las mejillas y se quitan las arrugas. Y todo ello para nada, porque hay dos zonas que delatan la verdadera edad de toda mujer. ¿Cómo se puede saber la edad de una mujer?

Manos

Las manos de la mujer son una zona en la que se puede ver claramente su edad. Lo interesante es que los procesos de envejecimiento se muestran en el lado externo de las manos antes que en la cara. Esto es causado por una hipodermis más fina, que se deteriora con el tiempo y es visible en las manos. La suave piel de las manos es susceptible a los daños, y también empeora con la edad. Sólo tienes que mirar las manos de tu abuela.

Deberías, por lo menos de manera profiláctica, cuidar de la piel de esta zona para hacer que el paso del tiempo sea un poco menos visible en tus manos. Es recomendable que aprendas a aplicarte la crema (en verano cremas hidratantes ligeras y en invierno cremas más aceitosas con propiedades protectoras). ¡Deberías recordar que los primeros signos del envejecimiento en la piel de las manos ya se pueden observar cuando cumples los 30!

Cuello y escote

Cuidamos sistemáticamente de la cara, pero a menudo nos olvidamos del cuidado del cuello y del escote. A veces, durante el cuidado nocturno de la piel, pasamos por encima del cuello sin darnos cuenta, pero sólo cuando hay demasiada crema de sobra en nuestras manos. Esto es un error que posteriormente nos costará tener la piel seca en el cuello y un escote antiestético. Esto es debido a que la piel de esta zona es delicada y está particularmente expuesta a los factores dañinos externos.

Los primeros signos del envejecimiento se pueden observar cuando empiezan a aparecer las arrugas en el cuello y el escote. Estos signos del envejecimiento se pueden evitar con una acción profiláctica clave. No te olvides de hidratar la piel del cuello y el escote, porque puedes usar fácilmente los mismos serums y cremas que en la cara.

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